Qué morbo tenía Brenda Boop. Toda una revolución en su momento con ese cuerpecito pequeño, tetas muy bien puestas y ese ano que pedía ser taladrado. Sin olvidar su cara de morbosa. Muy buena escena dejándole el ano muy abierto y la carita recibiendo esa pedazo de corrida de semen por parte de Robin Reid.